19 de agosto de 2025
Comunicado de La Coordinadora de Organizaciones para el Desarrollo.
- En el día de la asistencia humanitaria, nos sumamos a miles de voces y damos la voz de alerta: el incumplimiento sistemático e impune del derecho internacional humanitario supone graves consecuencias sobre la vida de millones de personas y sobre toda la humanidad
- En lo que va de año, 265 personas trabajadoras humanitarias han sido asesinadas; 173 de ellas en Palestina. Nunca antes se habían alcanzado tales cifras
- Exigimos la protección de trabajadores y trabajadoras humanitarias y de la población civil; respeto al derecho internacional humanitario; una reforma del sistema humanitario que asegure una financiación suficiente y el respeto pleno a los principios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia, para garantizar una asistencia que es esencial para la vida. Debe garantizarse el fin de la impunidad
Las violaciones del derecho internacional humanitario se están produciendo de forma sistemática en todo el planeta, Sudán o Palestina reflejan de manera descarnada esta situación. En Palestina, solo en lo que va de año, han sido asesinadas 173 personas trabajadoras humanitarias; el Gobierno de Israel utiliza el hambre como arma de guerra, ataca a hospitales y asesina a personal sanitario, a la población civil -incluso en puntos de reparto de comida- y bloquea la entrada de la ayuda humanitaria. Organizaciones humanitarias de todo el mundo denunciamos recientemente que “mientras el asedio del Gobierno israelí mata de hambre a la población de Gaza, el personal humanitario se ve ahora obligado a hacer cola en los mismos comedores sociales, arriesgándose a recibir disparos solo para alimentar a sus familias, junto a aquellos a quienes se supone que deben ayudar”.
El contexto mundial es tremendamente complicado y pone en jaque las normas humanitarias establecidas hace décadas.
Otros países como Ucrania, Sudán del Sur, Eritrea o el Sahel también viven situaciones muy complejas en las que no se garantiza plenamente la asistencia humanitaria. El contexto mundial es tremendamente complicado y pone en jaque las normas humanitarias establecidas hace décadas.
80 años después de la creación de Naciones Unidas, sus principios fundacionales son socavados por quienes deberían defenderlos. El secretario general de la ONU, António Guterres, ha lamentado los ataques sin precedentes a la Carta de la ONU. “El nivel de impunidad en el mundo es políticamente indefendible y moralmente intolerable”, ha denunciado.
Asesinar a trabajadores y trabajadoras humanitarias se ha normalizado y rara vez supone consecuencias legales sobre quienes cometen los crímenes.
La peligrosa normalización de lo injustificable
Organizaciones de la sociedad civil también han dado la voz de alerta; los niveles de ataques a la asistencia humanitaria no tienen precedentes. La labor humanitaria sufre graves restricciones y es objeto de ataques constantes. Asesinar a trabajadores y trabajadoras humanitarias se ha normalizado y rara vez supone consecuencias legales sobre quienes cometen los crímenes. La promesa de protección se ha roto con total impunidad.
Como ONG dedicadas a garantizar la asistencia humanitaria, renovamos nuestro compromiso con el Derecho Internacional Humanitario, con los principios humanitarios y los derechos humanos. Exigimos, una vez más, el cumplimiento riguroso de las normas establecidas internacionalmente para garantizar la atención, la protección del personal humanitario y de la población civil, el respeto de los derechos humanos y el fin de la impunidad. Millones de vidas están en juego.
El cumplimiento riguroso del Derecho Internacional Humanitario debe garantizarse de forma estricta para evitar complicidades con violaciones de las normas comunes asumidas en el marco de Naciones Unidas
Debe garantizarse una atención diferenciada y específica a los grupos vulnerables que merecen una protección especial de acuerdo al Derecho Internacional Humanitario, con especial foco en mujeres y niñas. Deben establecerse los mecanismos necesarios para que estos grupos participen en la toma de decisiones, estrategias y acciones que se tomen en los contextos humanitarios
Además, expresamos nuestra preocupación por el proceso de reforma del sistema humanitario mundial, el conocido como reset humanitario de Naciones Unidas. En línea con VOICE, nuestra organización aliada en el ámbito humanitario, reclamamos que la reforma humanitaria asuma el compromiso de financiar de forma suficiente una acción humanitaria basada en principios; impulse una reforma integral del sistema basada en el liderazgo local; preserve la calidad, la dignidad y la inclusión en la acción humanitaria; invierta en resiliencia: preparación, acción anticipatoria y el nexo entre la acción humanitaria, el desarrollo y la paz; y apoye a las ONG, tanto locales como internacionales, como actores clave del sistema.
Obligaciones legales ineludibles
Recordamos las obligaciones legales de los Estados y la exigible rendición de cuentas ante las fallas sistémicas que permiten que persista la violencia contra el personal humanitario y la población civil. El respeto riguroso al Derecho Internacional Humanitario es imprescindible para evitar cualquier forma de complicidad con las violaciones de las normas comunes asumidas en el marco de Naciones Unidas. Está en juego un sistema humanitario establecido hace 80 años y la humanidad no puede permitírselo.